Pese a los anuncios del restablecimiento de las relaciones comerciales con Venezuela, el gran problema para normalizar esos acuerdos, desde el punto de vista colombiano, es la credibilidad que tenga cualquier anuncio del gobierno del presidente Hugo Chávez.
Aunque imagino que los industriales tomaran este anuncio con bastante cautela, es de esperar que los hechos ratifiquen lo que se ha dicho al término del encuentro de ayer entre los presidentes de Colombia y Venezuela.
Primero que todo, hay que tener en cuenta que hasta que no se salden las deudas con los exportadores colombianos no es creíble que vaya a crecer el comercio entre las dos naciones, así el presidente Hugo Chávez lo diga. Ningún empresario va a arriesgar su capital de trabajo exportando si no le van a pagar. Y lo que vaya a pasar de aquí a los próximos seis meses 0 un año dependerá mucho de la eficacia de la comisi6n para saldar esas deudas.
En eso será muy importante la primera comisión, que se encargará del pago de la deuda y el reimpulso de las relaciones comerciales, porque de ello dependerá el rumbo del comercio del lado colombiano hacia Venezuela.
Si eso se soluciona y se aclara, no veo ningún inconveniente para que el comercio fluya de nuevo hacia ese país. Porque el aparato productivo colombiano sigui6 funcionando y el venezolano está colapsado. De hecho, prácticamente la mayoría de los bienes de consumo masivo disponibles en los mercados de Venezuela son importados y el surtidor natural es Colombia. Por lo tanto no creo difícil restablecer los canales de distribución.
Ahora, el otro aspecto importante, es que debimos aprender la lección sobre lo necesario que es diversificar los mercados; no pensar en el venezolano únicamente. Creo que esa lección fue asimilada por los productores colombianos y de ahora en adelante ningún industrial nacional va a poner todos los huevos en esa sola canasta.
Lastimosamente, la institucionalidad venezolana es muy pobre y el poder está concentrado úricamente en la figura del Presidente, razón por la cual es imposible blindar los vínculos comerciales. Por eso cuando el presidente Chávez decide cortar las relaciones comerciales con Colombia, se cortan de un día para otro.
En lo que tiene que ver con el comercio de frontera, con seguridad a partir de hoy ya queda normalizado; porque es un comercio que se ve afectado s610 por las trabas administrativas, por las dificultades que les impongan a los colombianos y venezolanos para pasar de un lado a otro de la frontera y que no se les arrebate o les sean incautadas sus mercancías en el paso de un lado a otro.
(Este asrtículo de opinión fué publicado en el períodico El País de Cali el día 11 de agosto de 2010)
miércoles, 11 de agosto de 2010
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