viernes, 29 de julio de 2011

Exportar creciendo y diversificando

En 2010 las exportaciones del Valle experimentaron un crecimiento de 6.5%, aumento muy parecido al del año 2008. Este dinamismo contrasta con la fuerte caída (decrecimiento del 9.4%) que sufrieron las exportaciones vallecaucanas en 2009. El panorama es más alentador que el del 2009, pero los nubarrones no se han despejado del todo.

El 56% de nuestras exportaciones están concentradas en 4 socios comerciales Estados Unidos (18.8%), Ecuador (15.2%), Perú (12.0%) y Venezuela (10.1%). Y esa concentración ha sido así por muchos años, la diferencia en lo que ha ocurrido desde 2007 es la fuerte caída de las exportaciones a un socio comercial tan importante como es Venezuela. En 2007, Venezuela representaba el 23% de las exportaciones, mientras que en 2010 sólo se alcanzó venderle el 10% de nuestras exportaciones. La pérdida de un socio comercial como Venezuela significó la caída de nuestras exportaciones a ese destino en 44.3% en 2010, representan una gran talanquera para un mayor dinamismo de nuestras exportaciones en ese año.

Gráfico. Composición de las exportaciones del Valle por destino 2007 y 2010.


Fuente: Banco de la República y Cálculos Cienfi.

Precisamente, la composición del comercio exterior del Valle implica varios retos para este año. Por un lado, el TLC con Estados Unidos es crucial para los exportadores vallecaucanos y cada mes que pasé se están desaprovechando las potencialidades del Valle en materia exportadora para ese mercado. Venezuela sigue siendo otra fuente de incertidumbre grande para los exportadores de la región. Nuestro “nuevo mejor amigo” no brinda las garantías para restablecer un comercio dinámico y vibrante como en el pasado y claramente los empresarios de la región lo han entendido así. Venezuela se ha convertido en un mercado marginal.
Y ahora, una de las economías más dinámicas de la región, Perú presenta una gran interrogante fruto del clima político y del cambio de gobierno. Ese clima de incertidumbre político en el vecino puede desacelerar nuestras exportaciones a los peruanos que crecieron en 35.9% en 2010.

Por otro lado, la calificación de grado de inversión, lo atractivo que se ha vuelto nuestro país para la inversión extranjera y el boom de la producción minera del país se unen al cambio de política monetaria del Banco de la República de empezar a subir las tasas de interés. Todos estos fenómenos están trabajando en la misma dirección: atrayendo la llegada masiva de dólares al país y por tanto manteniendo la tendencia de la tasa de cambio a la baja. El dólar cercano a los $2000 parece un tema del pasado.

Entonces, la incertidumbre política del TLC y el clima incierto en nuestros vecinos, así como el ambiente revaluacionista, pintan un panorama muy retador para los empresarios de la región. De hecho, en el primer trimestre de 2011, el DANE estima que las exportaciones del departamento cayeron en un 3.4% frente al mismo periodo de 2010. Este ambiente adverso implicará que nuestros empresarios deberán continuar su proceso de diversificación de destino de las exportaciones. La lección de 2007 y 2008 ya se aprendió, no podemos poner todos los huevos en la misma canasta. Apostarle a un solo socio, en ese caso fue Venezuela, no es una buena idea, pero ahora no puede ser apostarle todo a Estados Unidos.

Así, este año será un año importante para el futuro del sector exportador de la región, la buena noticia está por el lado del mercado local que se encuentra creciendo a un buen ritmo. El crecimiento de la economía colombiana permitirá a los empresarios apalancarse en el mercado local, para experimentar en nuevos mercados internacionales.

(este artículo de opinión fue publicado el 29 de julio de 2011 en el Diario el País de la ciudad de Cali)

Recuperación del ritmo de crecimiento de la Industria Vallecaucana

La industria es uno de los motores del crecimiento del Valle del Cauca y así lo fue en buena parte del siglo pasado y aún lo sigue siendo. De acuerdo al DANE, la industria representa aproximadamente el 16,6% del PIB departamental y el 12,1% dela producción industrial nacional. De hecho, en 2009 (año para el cuál existe la última cifra disponible de PIB regional), la producción industrial explicó nacional.

Este sector venía experimentando una caída en la producción, sus ventas y el empleo generado. Esa caída se prolongó hasta el primer trimestre de 2010. A partir de ese periodo la industria vallecaucana inició un proceso de recuperación lento pero estable.
Según la Muestra Trimestral Manufacturare del DANE, la industria en el área metropolitana de Cali (Cali, Yumbo, Jamundí y Palmira), presentó un crecimiento relativamente alto en el primer trimestre del 2011, cuando se compara con el mismo período del año anterior. De caídas en la producción real del 5,18% en el primer semestre de 2010, la industria a recuperado su ritmo de crecimiento pasando a un 5,35% en el primer trimestre de 2011l.
Por otro lado, para ese mismo trimestre las ventas de la industria vallecaucana incrementaron en 2.59% y por primera vez desde 2008. Esto gracias a la dinámica de la demanda interna, y en especial de las exportaciones de la región. Por ejemplo, para 2010 las exportaciones del Valle experimentaron un crecimiento de 6.5%, aumento que contrasta con la fuerte caída del 9.4% que sufrieron las exportaciones vallecaucanas en 2009. Este 2011, las ventas al exterior han continuado su ritmo de crecimiento y permiten que por fin las ventas de la industria de nuestra región estén creciendo.

Finalmente, el aumento de la producción industrial vallecaucana se está traduciendo en más personal ocupado. Desde 2008 el personal ocupado en la industria ha venido disminuyen trimestre a trimestre. Sólo en el primer trimestre de 2011 el aumento de la producción se ha empezado a traducir en un aumento en el empleo generado. Para el primer trimestre de 2011, el personal ocupado aumento en 2,11% con respecto al mismo trimestre de 2010. Esta tal vez es la mejor noticia para la región que experimenta una de las tasas de desempleo más altas del país. Entre marzo y mayo la tasa de desempleo promedio aumentó en Cali; pasando de 14,6% en 2010 a 15,4% en 2011. A diferencia de lo ocurrido en Bogotá y Medellín, el desempleo en Cali aún no cede.



Gráfico 1. Crecimiento de la producción, ventas y personal ocupado de la industria del Valle del Cauca. (crecimiento con respecto al mismo periodo del año anterior)



Fuente: DANE, Muestra Trimestral Manufacturera de Cali, Yumbo, Jamundí y Palmira (sin ingenios azucareros ni trapiches paneleros).


Cuando se analizan las cifras pos subsectores, se observa como el crecimiento es desigual al interior del sector. Por ejemplo, el sector que mayor crecimiento experimentó en su producción es el subsector de Fabricación de Maquinaria y aparatos eléctricos, con un crecimiento de la producción del 40,2% frente al primer trimestre de 2010. Este subsector fue seguido por el de Fabricación de Alimentos diferentes a confitería y cacao; subsector que incremento su producción en 28%. Por otro lado, subsectores tradicionales de la región como el de Fabricación de Detergentes y jabones y Fabricación de Papel y cartón experimentaros fuertes caídas en la producción de 23,9% y 17,7%, respectivamente.
Estas cifras muestran que si bien el sector industrial como un todo presenta una recuperación en el Valle del Cauca, hay subsectores que presentan una fuerte recuperación y una dinámica muy interesante, mientras que otros subsectores presentan una fuerte contracción. Solamente el tiempo nos permitirá determinar si este comportamiento implica un cambio trascendental en la estructura industrial del Valle del Cauca, o sólo se trata de un fenómeno coyuntural. Pero lo que si es claro, es que la recuperación de las exportaciones ha permitido que en algunos subsectores se presente una dinámica favorable . Y finalmente, esta dinámica implique un aumento en la generación de empleo en la región.

(Este artículo fue publicado en el diario la República de Bogota el día 29 de julio de 2011)

martes, 5 de julio de 2011

Empleo en Cali: Tarea pendiente

El crecimiento de una economía se traduce en bienestar para los individuos si se genera más empleo y ojalá formal. En los últimos días recibimos la buena noticia del crecimiento de la economía colombiana durante el primer trimestre de este año: un sorpresivo crecimiento frente al año anterior de 5,1%. Antes habíamos recibido la noticia de que Colombia recibía el grado de inversión. Este jueves, el DANE publicó los datos de empleo que son en términos generales buenos para todo el país. El promedio de la tasa de desempleo para el total nacional pasó de 12,5% en 2010 a 11,7% en 2011 para los meses entre marzo y mayo.

Lastimosamente, las buenas cifras de la economía colombiana no son tan buenas para el caso del Cali o por lo menos en lo que tiene que ver con el empleo. Entre marzo y mayo la tasa de desempleo promedio aumentó en Cali; pasando de 14,6% en 2010 a 15,4% en 2011. A diferencia de lo ocurrido en Bogotá y Medellín, el desempleo en nuestra ciudad no está cediendo. Esta es una noticia preocupante.
Según el mismo DANE, el promedio de ocupados durante los meses de marzo a abril disminuyó en 55 mil ocupados. Es decir hay menos caleños ocupados ahora que hace un año. Y en termino de desempleados hay, en promedio, prácticamente los mismo desempleados que hace un año: mil más.
Estas cifras preocupan mucho. Sobre todo cuando sabemos que la industria del Valle del Cauca está creciendo su producción, las exportaciones están creciendo, las obras públicas de la ciudad están en uno de los niveles más altos de la historia reciente de la ciudad. Es decir, el sector privado parece estar haciendo su tarea en términos de crecer la producción y vendiendo más por fuera. Por otro lado, la receta tradicional que tiene el sector público para aumentar el empleo, que es más obras públicas, se está empleando. A la ciudad no le cabe una obra de infraestructura más. Y aún así el desempleo no cede y se tienen menos empleos en la ciudad. Paro no hablar del subempleo que está en el orden del 31.8%. ¡Pero, a las otras ciudades importantes del país si les va bien! Es decir, este es un fenómeno más local.

El problema del empleo en la ciudad de Cali parece ser diferente al de otras ciudades, es un problema estructural. ¿qué quiere decir esto? Que no estamos generando los empleos que corresponden a para la capacitación de nuestra mano de obra o al contrario. Que no estamos atrayendo la cantidad suficiente de inversión a la ciudad. Que tenemos que repensar la vocación productiva de la ciudad y tener que definir claramente cual es el rumbo de nuestro aparato productivo. Tenemos que atacar el problema de raíz. En términos de empleo no vamos por el mismo rumbo de otras ciudades o del país .
Para disminuir las altas tasas de desempleo en nuestra necesidad se requiere de un equipo de choque y liderazgo. Lo que ha ocurrido en las últimas semanas con la criminalidad y violencia nos ha enseñado a los caleños que, tal como lo decía el general Naranjo, se necesita liderazgo para resolverlo. Bueno, el empleo es un problema tal vez igual o más complejo que el de la criminalidad y necesita liderazgo de la administración local. Estamos en mora de hacer frente a este problema atacando sus raíces y no quedarnos esperando que por inercia de la economía nacional se resuelva el problema en Cali. Esta tarea queda pendiente para el próximo alcalde.


(Este artículo de opinión fue poblicado en el diario el País de Cali el 4 de Julio de 2011)