martes, 18 de junio de 2013

Empleo en Cali no repunta (2013)

La semana pasada, el DANE divulgó las cifras de desempleo para el mes de abril. Los resultados a nivel nacional siguen siendo estables pero sin llegar a cumplir la meta. Pero los resultados para Cali y su área metropolitana sigue siendo preocupantes. La tasa de desempleo promedio para el periodo febrero-abril de 2013 fue del 16.4% en Cali frente a un 11.7% para las 24 principales ciudades del país. Cinco observaciones preocupantes saltan rápidamente a la vista cuando se analizan las cifras divulgadas por el DANE para nuestra ciudad. Primero, la tendencia de la tasa de desempleo en Cali y su área metropolitana es contraria a la nacional. No obstante la tasa de desempleo para las 23 principales ciudades del país viene cayendo lentamente mes a mes o en el peor de los escenarios se mantiene constante; en el caso de Cali la tendencia es creciente. Es más, la tasa de desempleo promedio de Cali tanto para el primer trimestre como para el periodo febrero-abril de 2013 es la más alta de los últimos 10 años. Para el caso de la tasa de desempleo promedio nacional, en el periodo febrero-abril de 2013 se presentó la tasa de desempleo más baja de este siglo. Esta situación es preocupante para nuestra ciudad, en especial si la tendencia no se revierte. Segundo, nuestra tasa de desempleo es una de las más altas del país. Como ha ocurrido en los meses pasados, de manera consistente, mes tras mes, únicamente 5 de las 23 principales ciudades del país tienen tasas de desempleo mayores. Esas ciudades son: Quibdó, Cúcuta, Popayán, Armenia e Ibagué. ¡La tasa de desempleo promedio de Cali para febrero-abril de 2013 fue aproximadamente 40% más grande que para el total del país, 78% más alta que la de Bogotá y 95% más alta que la de Barranquilla (la tasa más baja del país)! Tercero, el número de ocupados promedio en la ciudad de Cali y su área metropolitana es aproximadamente el mismo. El promedio de ocupados en Cali para el periodo febrero-abril de 2013 fue de 1,048,000 caleños; igual que el promedio de 2012 para el mismo período. Es decir, los nuevos empleos generados solo han compensado los que se perdieron. Vale la pena mencionar que para el mismo período, en Bogotá se presentaron 92 mil más ocupados, en Barranquilla 30 mil más, en Bucaramanga 20 mil más y en Medellín 14 mil más. Cuarto, si bien el número de ocupados es el mismo; la desagregación de los ocupados por rama de actividad económica en Cali cambió para el periodo febrero-abril entre 2012 y 2013. Según las cifras del DANE, en 2013 se presentaron en nuestra ciudad 21 mil menos ocupados en la industria que en 2012; 22 mil menos en el sector de Comercio, hoteles y restaurantes. Y, ¿a dónde se fueron esos empleos para mantener el número de ocupados constante? El sector de “Servicios, comunales, sociales y personales” existían 27 mil ocupados más en 2013 y el sector de “Actividades Inmobiliarias” tenía 14 mil ocupados más. Es más, cuando se analizan las cifras por posición ocupacional, se encuentra que en 2013 se tienen 15 mil ocupados más que se clasifican como “Empleado doméstico”. Así, de los 27 mil ocupados más en 2013 en el sector servicios, algo más de la mitad puede estar asociado al servicio doméstico. Estas cifras dice mucho del tipo de empleo que se está destruyendo y generando en la ciudad. Finalmente, desde 2001, la tasa de desempleo promedio trimestral (trimestre móvil) más baja fue de 10.1% para el periodo octubre-diciembre 2007. Es decir, por mas de una década no hemos experimentado una tasa de desempleo de un solo dígito. Vale la pena recordar que la meta del gobierno nacional es tener tasas de desempleo de un solo dígito. Este panorama no es alentador. Las cifras muestran una realidad clara y un problema que es prioridad de todos los caleños: la generación de empleo en nuestra ciudad. La buena notica podría ser que estas cifras aún no reflejan el efecto de medidas del gobierno nacional como el "Plan de impulso a la productividad y el empleo (PIPE)" y el “Servicio de Empleo”. Ojalá estas medidas empiecen a tener efecto sobre la capacidad de generar empleo en la ciudad. (Esta columna de opinión fue publicada en el diario El País de Cali el 17 de junio de 2013)

lunes, 3 de junio de 2013

¿Para qué la OCDE?

La OECD es claramente un club fundado por “países ricos”. Vale la pena recordar que fue creada a partir de la Organización Europea para la Cooperación Económica (OECE). La OECE nace después de la segunda guerra mundial para administrar el Plan Marshall que ayudaría a la reconstrucción de Europa Occidental. Tras del éxito del plan Marshall y la incorporación de Estados Unidos y Canadá, esta organización se convierte en 1961 en la OECD. Así, 19 países crearon la OECD en 1961. Para mediados de la década de los noventa, ya eran 24 países los miembros. Australia Nueva Zelanda y Japón se había unido al selecto club. En la segunda parte de la década de los noventa, reciben la membresía México, Corea y otras naciones de la antigua cortina de hierro. Es decir, para 1999 ya eran 29 los países miembros. En 2000 se incluye a otro país (Eslovaquia), en 2010 se invita a los últimos 4 miembros (incluido Chile), para completar 34 países miembros. Así, este club es bastante exclusivo que ha estado en plan de expandirse. ¿Qué tan bueno es ser miembro? Ahora podremos decir que hacemos parte de un grupo selecto de países, todos no llegan ahí. Ser miembro de este club, así como los clubes sociales, implica cierta “etiqueta” en el comportamiento de sus socios. En este caso, los “socios” de la OECD están comprometidos con la economía de mercado y la democracia. Pueden existir muchos beneficios, pero creo importante resaltar uno. Esta membrecía permite de hacer atractivo el país para la inversión extranjera. Ahora el compromiso de brindarle confianza a los mercados es de país y no sólo del gobierno de turno. En otras palabras, gobierno tras gobierno tendrá que comprometerse a crear las condiciones para que la economía de mercado se mantenga. A menos que el gobierno de turno quiera entrar a la historia de ser el primer gobierno que hace que un país sea retirado de la OECD. Esto genera claramente confianza por fuera del país. (Este artículo de opinión fue publicado por el diario el País el 31 de mayo de 2013)